¿Que somos? Alma o Espíritu

El espíritu es la esencia de nuestra vida, es la chispa que se desprende en algún momento del Padre, buscando tomar conciencia de sí misma; aunque nunca se desprende por completo porque nuestra vida depende de Él, siempre queda una conexión.

El alma es lo que el espíritu necesita para poder expresarse en los mundos más densos. En el mundo de la materia, el espíritu no puede expresarse para ser percibido por aquellos que no tienen las capacidades de conectarse con ese mundo espiritual. Para hacerlo necesita vehículos de expresión y la sumatoria de esos vehículos de expresión hacen al alma.

Hay dos almas. Una es la que está en encarnación que son los cuerpos más densos de estas tres dimensiones; y hay un alma superior, que es la que el espíritu necesita aun en los planos superiores para entrar en contacto con los mundos más sutiles.

Es decir ¨un cuerpo se tiene, un alma se tiene y un espíritu se es¨.

Debemos centrarnos en el trabajo que hay que hacer a través del cuerpo para tomar conciencia de la realidad de Dios. Al contrario de lo que muchos piensan, no es abandonar lo material y volverse espirituales, sino que es ser espirituales en el mundo material en el que estamos, tomando con más amor todo lo que hacemos, y no tan solo estar pendientes y atentos de lo que queremos obtener, sin que nos interesen las consecuencias o el camino que tenemos que recorrer para alcanzar lo que queremos.

Nuestra vida es por el Espíritu, sin él no tenemos vida. La vida tiene sentido cuando es vivida con amor, pero con ese Amor que va más allá de las personas que elegimos amar, ese Amor que no pone barreras ni considera de manera diferente a los cercanos de los desconocidos. Pensamos que corresponde a otros brindar Amor, llevar ayuda o servicio a los demas. Hay muchas cosas que comprender, que son las que hacen a un trabajo interno para que ese alma se vaya purificando.

El Alma en encarnación está constituida por el cuerpo físico, el cuerpo emocional y el cuerpo mental. Si hay orden entre esos tres cuerpos, el corazón puede impulsar el objetivo del Padre sin trabas ni dificultades, porque hay una mente que está dispuesta, una emoción que está acompañando al pensamiento, y un cuerpo que en afinidad responde a esa emoción que lo impulsa.  Ese es el orden. Siempre el pensamiento va primero, de él se desprende una emoción y es ella la que lleva al cuerpo a obrar.

En la cabeza hay muchas cosas de este mundo que parecen más importantes que las del Padre. Muchos piensan que los asuntos del Espíritu son para los religiosos, no para nosotros o que será algo que tendremos que tratar cuando partamos de este mundo. Pero todos estamos aquí por nuestro Espíritu, es él quien nos da la vida. Cuando el espíritu se retira el cuerpo no tiene más vida , es lo que llamamos muerte física.   Toda persona que está en este mundo ignorando que lo más importante, lo que está por encima de todo, es el Amor de Dios, es en realidad una persona que está muerta en vida. Es decir, está muerta para la realidad del espíritu.

El paso por la Tierra es algo pasajero y muy pequeño para la eternidad del espíritu. El tiempo en que las personas vienen a este mundo, desde que son engendrados hasta el momento que les toca partir, es un día de clases en la escuela, que es el mundo. Cuando se termina este día de clases se retorna al verdadero hogar.

Daniel Ferminades

Extraído del encuentro ¨Verdades Develadas desde la Conciencia¨ Ciudad de Mendoza, Argentina. Octubre 2014 (141025).