¿Por qué tememos?

El temor es a lo desconocido, la cura para ese temor es el conocimiento, y por lo tanto cuando el temor se presenta nos advierte que hay peligros. ¿Por qué nos advierte que hay peligros? Porque estamos entrando en un terreno desconocido y entonces nos dice: ¡atentos! ¡precaución! ¡prestar más atención de la que habitualmente prestamos! Es lo que nos está queriendo decir. Pero muchas veces el temor  nos gobierna y paraliza, de tal manera que damos la vuelta buscando seguridad en lo conocido, evitando las situaciones que se presentan. La manera de que el temor desaparezca es enfrentándolo con precaución, y al conocer el temor desaparecerá. No se teme a lo conocido.

Entonces el origen del temor no es en nosotros, no generamos temor sin sentido, sino que el temor se presenta por falta de conocimiento. Por ejemplo, en una habitación con la luz encendida sabemos por donde entrar y por donde salir. Sin embargo si las luces se apagan y tenemos que salir, generamos cierto temor por las cosas con las que  nos podemos chocar, por lo que nos puede pasar, por los daños físicos que podemos sufrir al intentar alcanzar la salida.

La base de prácticamente todos los temores, que con fuerza invaden al hombre, está en la intensidad con la que se aferra a su forma física no queriendo padecer en ningún momento. Queremos que todo esté preparado y acondicionado para que podamos pasar sin lastimarnos, sin dolor, y esa no siempre es la realidad de la vida. Hay muchas cosas buenas, lindas, y hay cosas que no son tan buenas y tal vez hasta desagradables, pero más allá de eso son parte del camino. En el camino encontraré partes que son llanas, limpias, y me será fácil transitarlo, y también es probable que encuentre partes en donde no es llano sino que hay que escalar,  hay roca o espinos; entonces tengo que ir viendo cómo sortear todo esto, si lo que entiendo es que tengo que avanzar.

¿Entendemos que estamos en un  camino?. Si estamos en un camino tenemos que avanzar y movernos para poder ir tomando Conciencia de lo que es estar vivo. No es simplemente dejarse llevar por la naturaleza,  hay que enfrentar a Conciencia todo lo que se presenta, y en la medida que a Conciencia  lo vamos enfrentando, vamos obteniendo respuestas de la vida a partir de las experiencias que tenemos.

Daniel Ferminades

Extraído del encuentro ¨Verdades Develadas desde la Conciencia¨realizado en la ciudad de Santa Fe, Septiembre 2013 (130911)